El pescado fresco debe mantenerse frío en todo momento y a menudo se presenta sobre un lecho de hielo picado para mantenerlo fresco y a una temperatura constante. Una buena iluminación resalta la humedad de la piel y el brillo de las escamas para que el pescado luzca como recién descargado del barco.
Pescados y mariscos son productos muy perecederos. Aquí es aún más importante producir un escenario que haga hincapié en la frescura de los productos. Un tono de luz blanco frío apoya a la presencia de frescura de estos productos.
Una iluminación adecuada crea una atmósfera que anima a los clientes a comprar y muestra la mejor cara de los productos. Realza el color y la naturalidad de los alimentos. Además de reducir el consumo, estudios avalados aseguran que el estado de conservación de los alimentos es más prolongado. Un cambio en la iluminación de los lineales de alimentación implica un incremento de la vida útil de los productos comercializados.
La exposición prolongada del producto al calor y a la redacción ultravioleta puede descomponer el pescado. Por ello necesitaremos una luz a una temperatura de color adecuada y limpia. Es muy importante el control de los procesos bioquímicos dependientes de la temperatura, para que nuestro género no sufra pérdidas de calidad y color, por ello es muy importante mantener el expositor en condiciones térmicas óptimas.
Una luz blanca y fría destacará a la perfección los pescados blancos como el bacalao, el lenguado y rodaballo. Para pescados rojos como el salmón y el atún, un color más cálido con un toque de rojo en el espectro realzará el atractivo natural del pescado fresco.
Podemos aprovechar el hielo sobre el que está expuesto el pescado para lanzar haces direccionales que acentúen los reflejos del hielo, para que el pescado y marisco parezca más fresco y brillante. En el caso de la iluminación de pescados y mariscos frescos las luminarias led potencian la frescura de pescados y mariscos blancos y rojos.
indican los estudios de consumo, el color es el atributo más importante para el cliente a la hora de decidir su compra. Si se resaltan los colores naturales, el producto exhibe una imagen fresca y sugerente. Las encuestas indican que más de un tercio de los productos frescos adquiridos en los expositores de autoservicio se compran por impulso, simplemente porque parecen atractivos.