Los relés son dispositivos electromecánicos que funcionan como interruptores controlados por un circuito eléctrico en el que se acciona un juego de contactos que permiten abrir o cerrar otros circuitos independientes. Se les consideran amplificadores eléctricos, por el hecho de controlar un circuito de salida de mayor potencia que el de entrada y fueron inventados por Joseph Henry en 1835; que aunque fue también el inventor del telégrafo la patente se la adjudicó Samuel Morse.
En la actualidad una de las marcas más conocidas que los comercializa y fabrica la encontramos en el siguiente catalogo de distribuidores carlo gavazzi, un hombre que vivía en Milán y que hace ochenta años de adelantó al futuro y a la automatización industrial electromecánica.
El funcionamiento de un relé, es básico y consiste en: un electroimán hace bascular la armadura al ser excitada, cerrando los contactos dependiendo de si es N.A ó N.C (normalmente abierto o normalmente cerrado). Si se le aplica un voltaje a la bobina se genera un campo magnético, que provoca que los contactos hagan una conexión. Estos contactos pueden ser considerados como el interruptor, que permite que la corriente fluya entre los dos puntos que cerraron el circuito.
La gran ventaja de los relés electromagnéticos es la completa separación eléctrica entre la corriente de accionamiento, la que circula por la bobina del electroimán, y los circuitos controlados por los contactos, lo que hace que se puedan manejar altos voltajes o elevadas potencias con pequeñas tensiones de control.