Los salarios de tramitación son los salarios a los cuales tiene derecho un trabajador cuando una empresa opte por la readmisión del trabajador, después de que un tribunal haya calificado el despido como improcedente o nulo. Dicha cantidad corresponde a los salarios dejados de percibir por el trabajador desde la fecha del despido hasta la fecha de la sentencia que declare la improcedencia o nulidad del despido.
El objetivo de los salarios de tramitación es compensar al trabajador de uno de los perjuicios del despido, el no percibir retribución alguna desde la fecha del despido. Como resultado, el trabajador no se ve perjudicado económicamente por el despido efectuado por la empresa, y debe percibir el mismo salario como si el despido nunca hubiera existido.
La reforma laboral, elaborada en el 2012, llamada también, Reforma Profunda, decidió eliminar los salarios de tramitación en el despido improcedente cuando la empresa opta por la indemnización. Si un despido es improcedente, la empresa debe readmitir o indemnizar al trabajador en cinco días. En caso de silencio, la opción será la readmisión. Si se opta por esta, la empresa estará obligada a abonar los salarios de tramitación desde la fecha del despido hasta la notificación de la sentencia.
En el caso de encontrarse en esta situación, la solución más factible será poder ponerse en contacto con abogados especialistas en salarios de tramitación con el propósito de llegar a un acuerdo o más bien, conseguir aquello que es tuyo.