Según el camino profesional y las diferentes especialidades que un traductor puede tomar es posible especializarse en diversos tipos de traducción pero solamente nos centraremos en la traducción especializada, la traducción jurada o certificada y la traducción para organismos internacionales.
- Traducción especializada: esta categoría comprende las traducciones de textos de consulta o de referencia, que por lo general están escritos con un lenguaje y una terminología de especialidad y su principal función es puramente práctica. Según la especialidad se pueden clasificar según sus características:
- Textos científicos: física, química, biología, medicina, etc.
- Textos jurídicos y legales: testamentos, documentos de litigios, acuerdos, contratos, etc.
- Textos académicos: ensayos, tesis doctorales, artículos académicos, etc.
- Textos financieros: balances corporativos, actas de juntas de accionistas, informes, etc.
- Textos técnicos: fichas técnicas, guías de usuario, manuales de instrucciones, etc.
- Traducción jurada o certificada: traducciones que se precisan para trámites en organismos internacionales como consulados, embajadas, notarías o ministerios. Se caracterizan por estar sellados y firmados por un traductor oficial certificado y habilitado para realizar esta función.
- Traducción para organizaciones internacionales: traducción de documentos para agencias de la ONU, entidades administrativas, institutos internacionales y ONGs. Puede ser cualquier tipo de documento relacionado con este tipo de organizaciones y agencias internacionales. No requieren el sello de traducción oficial.